domingo, 22 de septiembre de 2013

¿Por qué destruir un mundo lleno de vida y alegría eterna para obtener los caprichos del ser humano que sólo le dan a este alegría durante un breve instante? Las flores se marchitan, como también nosotros pero decirme, ¿a caso no somos peores nosotros con nuestra avaricia que unas flores que lo único que hacen es adornar con su belleza y prolongar la vida de insectos como las abejas? 

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